Si eres uno de los que piensa asistir el domingo a la tradicional fiesta de Año Nuevo en Times Square, la verdad es que eres muy valiente. Los pronósticos para esa noche aseguran que el millón de personas que allí se congregarán para recibir el 2018 literalmente se congelarán con temperaturas que podrían incluso bajar más de los 11° Fahrenheit.
La ola de frío ártico que afecta esta semana a la Gran Manzana, y que obligó a activar el ‘Código Azul’, continuará hasta el próximo domingo, cuando se espera que como todos los años una multitud proveniente de todos los rincones del mundo se congregue en el llamado “ombligo del mundo”.
El Servicio Meteorológico Nacional está pronosticando que el último día del 2017 será soleado, pero con temperaturas máximas que no superarán los 24°, y con mínimas que estarán en el punto de congelación registrando apenas 11°.
Pero cuando el conteo regresivo comience y la tradicional bola de cristal inicie su descenso, el termómetro podría incluso bajar aún más de lo pronosticado. “Puede ser un poco más frío que esos 11°”, dijo Dave Dombek, meteorólogo de AccuWeather, al New York Post.
Estas temperaturas no son normales para la celebración del Año Nuevo, indicó el Servicio Meteorológico Nacional, agregando que por lo general para el 31 de diciembre el termómetro marca unos 39° como máxima y unos 28° como mínima.
