SANTO DOMINGO.- El Ministerio de Salud Pública informó este domingo que el número de casos por COVID-19 en el país aumentaron a 202 , tras la detección de 90 nuevos casos.
La información fue ofrecida por el ministro Rafael Sánchez Cárdenas en rueda de prensa.
El funcionario agregó que se mantiene en tres el número de fallecidos por el virus en República Dominicana, mientras que fueron descartados 395 casos sospechosos.
El ministro Sánchez Cárdenas, detalló también que 56 personas están hospitalizadas y 143, en aislamiento domiciliario.
El galeno aseguró que la República Dominicana aún no está en fase de transmisión comunitaria del virus, pero advirtió de que los datos indican que se va “caminando” en esa dirección.
“A día de hoy vamos acercándonos a la transmisión comunitaria, pero todavía estamos en fase de conglomerados”, dijo Sánchez Cárdenas en una rueda de prensa celebrada por internet.
Añadió que, de los casos confirmados, 41 tienen antecedentes de viaje a países con transmisión local del virus, 34 de transmisión local (contactos y expuestos) a nivel local y 127 con antecedente de exposición actualmente bajo investigación.
De igual forma, reveló que, de los casos confirmados, el 59% son hombres y 41% son mujeres, con un promedio de edad de 45 años (Rango: 02—88 años).
Añadió que la provincia con mayor número de casos confirmados de COVID-19 es el Distrito Nacional con 88 casos, seguido de Santo Domingo con 31 casos y Santiago con 29 casos.
268 personas se mantienen en seguimiento por tener historia de viaje a países con transmisión o por haber estado en contacto con casos confirmados.
Entre los últimos infectados se encuentra el canciller, Miguel Vargas, que anunció este domingo que ha dado positivo por coronavirus, aunque de momento no presenta los síntomas de la enfermedad.
La República Dominicana está en estado de emergencia desde el pasado jueves, el Gobierno ha decretado el cierre de fronteras y ha clausurado los comercios no esenciales y ha vetado la celebración de actividades culturales o deportivas para tratar de frenar el aumento de los contagios.
