El podio lo completaron la representante de Haití, Raquel Pelissier, y la colombiana Andrea Tovar.

A pesar de que en las anteriores ediciones fueron 15 las finalistas elegidas en esta instancia, en esta ocasión compitieron 13 jóvenes para quedarse con la tiara. 12 de ellas fueron seleccionadas después de una semana de desfiles y entrevistas con el jurado en Filipinas. La restante, por primera vez, la votó el público, a través de la página oficial del certamen. Según el polémico conductor Steve Harvey –elegido nuevamente a pesar del error que cometió en la final de la edición anterior–, hubo más de 100 millones de votos en cinco días.

Esta selección fue superada por las representantes de Kenia, Indonesia, los Estados Unidos, México, Perú, Panamá, Colombia, Filipinas, Canadá, Brasil, Francia, Haití y Tailandia. De esta manera, la argentina Estefanía Bernal terminaba con su sueño de consagrarse ganadora.

En la instancia decisiva, se realizaron varios desfiles con cambios de vestuario. También hubo una ronda de preguntas por parte del público sobre interés general y hasta un intercambio con el jurado. Finalmente, Steve Harvey, que en esta oportunidad no se confundió, anunció que Iris Mittenaere es la nueva Miss Universo. La última ganadora del certamen, la filipina Pia Alonzo Wurtzbach, entregó la tiara a la representante francesa.

En el inicio de la transmisión, el conductor Steve Harvey se refirió al blooper de la edición anterior, cuando dijo que la representante colombiana había sido nombrada Miss Universo, pero inmediatamente se corrigió y dijo que el premio era para Miss Filipinas. “Ha sido un largo camino para llegar hasta aquí. Pagué un precio muy caro, pero cuando uno se equivoca hay que seguir avanzando, hay que seguir para adelante“, dijo, tomándose con humor su error.

Viajera, inquieta y sensual: así es la francesa Iris Mittenaere, nueva Miss Universo