MAO, Valverde. Bajo el radiante y candente sol característico de esta parte del país, cientos de activistas del colectivo Marcha Verde recorrieron este domingo varios sectores populares y céntricos de esta ciudad para manifestarse en contra de la impunidad y la corrupción administrativa, en donde anunciaron que recompondrán su plan de acción para continuar su demanda.

Los manifestantes recorrieron calles del centro y la periferia de este municipio y, al final, se concentraron en la calle Estanislao Reyes, donde se celebró un acto masivo.

Allí el sacerdote católico Mario Serrano leyó un documento en el que dijo que desde el Gobierno Central se han abierto las puertas de la frontera domínico-haitiana al narcotráfico, el tráfico de personas, armas de fuego y artículos comestibles.

“Las mafias políticas, comerciales y militares que operan en la frontera solo pueden mantenerse con la impunidad“, acentuó el religioso.

Lamentó que la construcción del acueducto de la Línea Noroeste fue utilizado para enriquecer a un “grupito“, y no para beneficiar a las miles de familias que la habitan.

A través del escrito, el padre Serrano denunció que en las oficinas de la Línea Noroeste del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y en el Ministerio de Educación existen miles de “botellas”.

Demandó investigar dónde fueron a parar más de 700 millones de pesos, aprobados para la construcción de calles, carreteras y caminos vecinales de esta parte del país.

Asimismo, exigieron la construcción de un hospital regional y de dos presas. Una en el distrito municipal Amina, perteneciente a esta provincia, y el otra en el municipio de Guayubin, de Montecristi.

Al final del escrito hacen un llamado a la ciudadanía a ampliar la lucha para lograr el fin de la impunidad y corrupción.